Nuevas reglas en EE.UU. para regular la visa H-1B y ayudar a los ciudadanos

Una afirmación importante se produjo horas después de que la Administración Trump anunciara nuevas restricciones a la emisión de una visa H-1B de no inmigrante. Quedó claro que el gobierno estadounidense mejorará los programas de visas de trabajo del país. Se dará prioridad a los trabajadores más cualificados. Esto garantizará que los empleos y salarios estadounidenses estén protegidos y que la economía del país esté salvaguardada después de verse gravemente afectada por el COVID-19.

Pero las nuevas medidas tomadas por la administración Trump afectarán a miles de trabajadores calificados y profesionales que están dispuestos a trabajar en Estados Unidos. Últimamente, la propia propuesta de aumentar el nivel salarial de los empleados extranjeros principiantes ha presentado el potencial de acortar una gran parte de las solicitudes de permisos de trabajo en Estados Unidos.

La norma final provisional fue anunciada el 6 de octubre de 2020 por el Departamento de Seguridad Nacional. Restringió la definición de “ocupación especializada” tal como lo pretendía el Congreso. La definición de exceso que existía antes había permitido a las empresas tener más voz en el sistema de contratación de trabajadores extranjeros.

Trump siempre ha sido de la opinión de que los empleadores del país han hecho un mal uso del programa de visas H-1B al convertirlo en una vía para la mano de obra barata del extranjero. Por lo tanto, los trabajadores estadounidenses han estado en desventaja, como observa Trump.

La Casa Blanca afirmó que las reformas extremadamente importantes mejorarán la calidad del programa H-1B. No habrá ningún cambio en el límite anual para las visas H-1B decidido por estatuto. Los empleadores ya no podrán reemplazar la mano de obra estadounidense con mano de obra extranjera más barata.

Los mayores beneficiarios de la visa H-1B en Estados Unidos son las empresas tecnológicas que contratan a miles de trabajadores calificados en el sector de países como India y China. Las nuevas reglas relativas a las visas de trabajo estadounidenses plantearán un gran desafío para los profesionales internacionales de TI.

También se vislumbran medidas para eliminar a los empleadores “en la sombra” que utilizan el programa H-1B para desplazar a trabajadores nativos en Estados Unidos. El período de validez de las visas de trabajo como la H-1B se reducirá de 3 años a 1 año. La necesidad de volver a presentar solicitudes con frecuencia y los consiguientes controles del cumplimiento de los criterios del programa H-1B disuadirá a estos empleadores en la sombra de operar.

Medidas como las inspecciones laborales ayudarán al Departamento a revocar las peticiones H-1B de los empleadores que no cooperen con dichas inspecciones.

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